Policía investigado por feminicidio en Comas continuaba en actividad pese a antecedentes de violación

 

Darwin Marx Condori Antezana, suboficial de la PNP y presunto feminicida de Sheyla Cóndor, se encuentra prófugo. Desde 2023 era investigado por una violación sexual grupal en su domicilio, el mismo lugar donde se halló el cuerpo desmembrado de Sheyla. A pesar de sus antecedentes, permanecía activo en la institución.

Indignación y conmoción han causado los detalles del caso del feminicidio de Sheyla Cóndor, una joven de 26 años cuyo cuerpo desmembrado fue hallado en el departamento del suboficial de tercera de la Policía Nacional del Perú (PNP), Darwin Marx Condori Antezana. Este último se encuentra prófugo y es ahora el principal sospechoso del crimen.

Sheyla desapareció el pasado 13 de noviembre, y tras días de búsqueda incansable, su familia logró rastrear conversaciones en su WhatsApp que indicaban que se había reunido con Condori. A pesar de los evidentes indicios, las autoridades inicialmente desestimaron las denuncias de la madre de la víctima, Sonia Torres, quien enfrentó múltiples trabas en su intento de reportar el caso.

El cuerpo de Sheyla fue encontrado el sábado 16 de noviembre en el domicilio del suboficial, ubicado en el condominio Torres de la Pradera, en Comas. Junto al hallazgo del cuerpo dentro de una maleta, seis personas, incluidos postulantes a la Marina y supuestos inquilinos, fueron detenidas para investigaciones. Sin embargo, el paradero de Condori sigue siendo desconocido.

Antecedentes alarmantes ignorados

Este no es el primer caso que involucra al suboficial Condori. En enero de 2023, fue denunciado por su participación en una violación sexual grupal junto a otros miembros de la PNP. A pesar de las pruebas contundentes, como exámenes médicos y testimonios en cámara Gesell, Condori recuperó su libertad tras solo 15 días de detención y volvió a sus labores en la institución policial.

Las víctimas de este caso relataron cómo Condori y sus cómplices las doparon, abusaron de ellas, y posteriormente intentaron sobornarlas para retirar las denuncias. La impunidad y la falta de acción judicial permitieron que el suboficial permaneciera activo en la PNP hasta los hechos recientes.

Exigencia de justicia

El caso ha destapado serias fallas en el sistema de justicia y en los procesos internos de la PNP. Sonia Torres, madre de Sheyla, exige cadena perpetua para el presunto feminicida y medidas inmediatas para evitar su fuga del país. Asimismo, ha hecho un llamado para que se investigue a fondo el encubrimiento institucional que permitió que Condori siguiera en funciones pese a sus antecedentes.

“Si la Policía hubiera actuado a tiempo, mi hija podría estar viva. Pedimos justicia para Sheyla y para todas las víctimas de este hombre”, declaró.

El caso evidencia la necesidad urgente de reformar los mecanismos de prevención y sanción en la PNP, así como de garantizar justicia para las víctimas de violencia de género.